Siempre he pensado que es muy delgada la línea que separa a la creatividad del miedo, a la ilusión por hacer cosas nuevas del miedo a equivocarnos, a las ganas por probar a realizar acciones nuevas por miedo a fallar, por miedo al qué dirán, ¿se reirán de mi? Estas preguntas probablemente sean el mayor limitante de nuestro potencial para realizar aquellas tareas que emprendemos en nuestra vida diaria, y creo que es una pena pero también pienso que hay una parte de culpa en nuestra sociedad, en el contexto en el que vivimos, y les diré por qué pienso esto.

Partimos de la base de que, si hay algo que destaca en los niños, es su creatividad a la hora de formular respuestas, preguntas, acciones, en definitiva su manera de actuar es de lejos la más creativa y natural, de todas cuantas etapas vivimos a lo largo de nuestra vida. De modo que, si cuando somos niños somos creativos, ¿qué sucede en nosotros?¿qué es lo que cambia en nosotros, o a nuestro alrededor, para que dejemos de ser así? Pues bien, la diferencia de los niños con respecto a los adultos es que ellos/as no tienen miedo a equivocarse, los niños arriesgan, si no saben prueban, así de simple.
Sin embargo, conforme vamos creciendo la timidez a la hora d expresarse, de tomar de decisiones, se torna en vergüenza, una vergüenza que acaba en miedo, un miedo que atenaza, que ‘’ata’’ y no deja actuar de la manera en que nos gustaría. Y esto, en mi humilde opinión, pienso que se debe a la sociedad, al contexto en el que nos encontramos, en el que se penaliza más el error, el fallo, la equivocación al fin y al cabo, más que se premia el acierto, el atrevimiento, la ‘’locura’’ por inventar, por crear cosas nuevas, por innovar. Es por ello que da auténtico pavor hablar en público, exponer tus ideas en una conferencia, debatir en una mesa redonda, realizar una exposición de un tema durante tu carrera en la universidad.

Y por otro lado, pienso que mucha parte de culpa la tiene la educación que recibimos desde pequeños, soy de los que opinan que nos ‘’cuadriculan’’, con un sistema en el que prevalecen la lengua, la literatura, el dominio del cálculo, las matemáticas, física, y un largo etc, en el que hay poca o nula libertad para que los estudiantes interactúen con la asignatura, se sientan libres, aprendan a tomar decisiones por sí solos sin que nadie les diga qué hay que hacer en cada momento. Es siempre más de lo mismo, ‘’toma el libro, a estudiarlo, te presentas a la prueba, te califican y se acabó’’, así un año tras año, y con ese paso de tiempo perdemos toda la creatividad que teníamos cuando éramos pequeños, esa capacidad de descubrir por sí solos, de investigar, interactuar con el entorno que nos rodea, de tomar decisiones en función del contexto, de los estímulos que percibimos.

Además hay que tener en cuenta que la inteligencia es increíblemente interactiva, esto quiere decir que nuestra experiencia, nuestra inteligencia, nuestro aprendizaje, aumenta muchísimo más cuando dejamos de ser agentes pasivos estudiando delante de un folio con muchas líneas, y pasamos a ser agentes activos, interactuamos con nuestro entorno, nuestra familia, amigos, compañeros de profesión, ellos/as son los que tienen la verdadera sabiduría, la de la experiencia, y esa no tiene precio porque el valor es incalculable. Permitamos hablar a las personas que están a nuestro alrededor, porque cualquiera te puede aportar un valiosísimo punto de vista, y escuchemos lo que nos quieren contar, cultivemos nuestras relaciones personales, no tengamos miedo o timidez a formular preguntas, nadie nace sabiendo.

De modo que pienso que es una suma de ambos factores la que desencadena que cada vez cueste más encontrar gente ‘’distinta’’, con personalidad, con ganas de ser diferentes, de brillar en aquella cualidad en la que siempre destacaron desde niño/a, aunque nunca es tarde si la dicha es buena, ¿verdad? Por ello, desde aquí animo a todo el que lea este post a que se replantee todo lo que hace cada día, qué puede modificar para que su día a día empiece a cobrar un significado especial, dejar de ser ‘’de la gente corriente y común’’ para empezar a convertirse en alguien especial, con una personalidad positiva, con ganas de brillar, sin ataduras, liberando todo el potencial que hay en su interior.

Les recomiendo que hagan click en el enlace que aparece debajo de estas líneas, porque es un vídeo que creo que merece mucho la pena ver, por el mensaje que transmite.
Me despido compartiendo con vosotros/as estas frases:
‘’Todos los niños nacen artistas’’
Pablo Picasso
”Ciertamente, es el mejor de los hombres aquel que todo lo considera, y examina qué cosa será en último término lo justo. Bueno es también el que sabe seguir lo que otro rectamente le enseña. Sólo es inútil aquel que ni conoce por sí mismo ni toma en su corazón la doctrina de otro.”
Hesíodo.
Que tengan una muy buena semana.
Pedro Gómez Piqueras
Enlace: http://www.pablocavaharinero.blogspot.com.es/2013/01/de-la-creatividad-al-miedo.html?m=1